Los sensores de presión de neumáticos (TPMS, por sus siglas en inglés) son dispositivos esenciales para garantizar la seguridad en la conducción. Estos sensores, obligatorios en todos los coches comercializados desde noviembre de 2014, se encargan de monitorear la presión de los neumáticos y alertar al conductor en caso de que haya una pérdida de aire. Sin embargo, tener en cuenta que estos sensores funcionan gracias a una batería interna, la cual tiene una vida útil limitada.
TPMS directo: para coches de alta gama
El TPMS directo es el tipo de sensor que se encuentra comúnmente en coches de alta gama. Este sistema utiliza sensores ubicados en el interior de las ruedas, específicamente en la válvula de inflado, para medir la presión y enviar una señal al vehículo. La desventaja de este sistema es que la batería del sensor tiene una vida útil de aproximadamente 5 a 7 años.
TPMS indirecto: el más común
El TPMS indirecto es el tipo de sensor más común y se encuentra en la mayoría de los coches. Este sistema utiliza los sensores de velocidad de las ruedas existentes en el sistema de frenos antibloqueo (ABS) para detectar diferencias en la velocidad de rotación de las ruedas. Si un neumático pierde presión, su circunferencia será menor y girará a una velocidad mayor que las otras ruedas, lo que activará la alerta de presión de neumáticos en el panel de instrumentos. A diferencia del TPMS directo, este sistema no requiere una batería interna y su vida útil depende de los sensores de velocidad del ABS.
Tener en cuenta que los sensores de presión de neumáticos son dispositivos de seguridad y su correcto funcionamiento es fundamental para garantizar una conducción segura. Por lo tanto, cuando la batería de un sensor TPMS directo llega al final de su vida útil, es necesario reemplazarla para asegurar que el sistema siga funcionando correctamente. En el caso del TPMS indirecto, si se detecta alguna falla en los sensores de velocidad del ABS, es recomendable llevar el coche a un taller especializado para su revisión y reparación.
El sensor de presión de neumáticos, también conocido como TPMS, es un dispositivo esencial para garantizar una presión adecuada en los neumáticos y, por lo tanto, la seguridad en la conducción. Este sistema utiliza diferentes métodos para detectar la presión de los neumáticos y alertar al conductor en caso de una pérdida de aire.
Método directo
El método directo es utilizado por algunos sensores TPMS y consiste en un sensor integrado en la válvula de inflado de cada neumático. Este sensor mide físicamente la presión absoluta del aire dentro del neumático y transmite esta información de forma inalámbrica a un módulo de control conectado a la computadora del coche. Si la presión de alguno de los neumáticos cae por debajo de un nivel mínimo, se activará una alerta visible en el panel de instrumentos.
Método indirecto
El método indirecto es utilizado por otros sensores TPMS y se basa en los sensores de velocidad de las ruedas existentes en el sistema de frenos antibloqueo (ABS). Estos sensores detectan diferencias en la velocidad de rotación de las ruedas, lo que indica una posible pérdida de presión en alguno de los neumáticos. En caso de una diferencia significativa de velocidad entre las ruedas, se activará una alerta en el panel de instrumentos.
En ambos casos, tener en cuenta que el TPMS es un sistema de seguridad activa diseñado para alertar al conductor sobre un cambio en la presión de los neumáticos. Sin embargo, estos sensores no reemplazan las inspecciones manuales y es recomendable revisar visualmente los neumáticos y su presión de forma regular.
¿Qué hacer si se enciende la luz TPMS?
Si la luz de advertencia del TPMS se enciende, indica que la presión de aire en al menos uno de los neumáticos ha caído por debajo de un nivel mínimo. En este caso, es recomendable detener el coche en un lugar seguro lo antes posible y revisar visualmente los neumáticos. Si alguno parece estar desinflado pero sin daños, se puede intentar inflarlo a la presión correcta y restablecer el TPMS.
¿Cómo cancelar la luz de advertencia TPMS?
La forma de cancelar la luz de advertencia del TPMS puede variar dependiendo del modelo del coche. Algunos vehículos cuentan con un botón físico para cancelar la alerta, mientras que en otros es necesario acceder al menú de la computadora del coche. Es recomendable consultar el manual del propietario para obtener instrucciones específicas.
¿Qué pasa si se sustituye algún neumático?
En el caso de los sensores TPMS directos, es necesario verificar el estado y la función de la válvula y el sensor cada vez que se reemplazan los neumáticos. La batería integrada en el sensor tiene una vida útil de aproximadamente diez años y no se puede reemplazar, por lo que es recomendable reemplazar toda la unidad al mismo tiempo que el neumático. En el caso de los sensores TPMS indirectos, no se requieren medidas adicionales al reemplazar los neumáticos, pero se recomienda reemplazar las válvulas.
¿Cambiar los neumáticos afecta al TPMS?
Si el coche cuenta con un sistema TPMS indirecto, cambiar los neumáticos no afectará al sistema y no será necesaria ninguna programación adicional. Sin embargo, en el caso de los sistemas TPMS directos, es necesario que un técnico reprograme el módulo de control a través del puerto OBD del vehículo cada vez que se cambie un neumático.
Los sensores de presión de neumáticos son dispositivos esenciales para garantizar la seguridad en la conducción. Tener en cuenta la vida útil de la batería de estos sensores y tomar las medidas necesarias para su reemplazo cuando sea necesario. Además, es recomendable realizar inspecciones manuales regulares de los neumáticos para asegurarse de que se mantenga una presión adecuada.
¿Quieres encontrar más artículos similares a Duración baterías sensores presión neumáticos? Te invitamos a explorar la sección de Baterías en Baterías CEA para descubrir más contenido relacionado.